Una estrategia europea sobre la biodiversidad: que la naturaleza recupere la salud contra el cambio climático y poder defender nuestro bienestar. Necesitamos que la naturaleza esté presente en nuestras vidas. La estrategia pretende proteger y recuperar la biodiversidad y el buen funcionamiento de los ecosistemas. Esto mejorará la resiliencia. La recuperación económica tras el COVID-19 debe evitar viejos hábitos perjudiciales, incluyendo un uso sostenible. Más de la mitad del PIB mundial depende de la naturaleza en cuanto a materias primas, El Pacto Verde guiará esta recuperación para que la naturaleza esté presente también en los objetivos económicos de la Unión Europea.

Ursula von der Leyen

Parecen términos que no competen mas que a personas especializadas en medio ambiente, en geografía, biología etc. Pero en este párrafo llama nuestra atención que aparecen relacionados directamente con dos conceptos muy presentes en el discurso actual: resiliencia y recuperación económica.

La Comisión Europea ha incluido la visión del experiencia del Foro Económico Mundial y su informe sobre cómo lo que ocurre en el medio ambiente perjudica a las empresas y a la enconomía , y no solo para sectores como la alimentación o la agricultura, sino que se puede hablar también de razones económicas para conservar la naturaleza.

Razones para preocuparse de la economía, de la biodiversidad y de los ecosistemas

Biodiversidad

Para la Real Academia de la Lengua, el término biodiversidad se refiere a la variedad de especies animales  vegetales en su medio ambiente.

La Comisión Europea, en su documento de estrategia sobre la biodiversidad   utiliza la definición de Naciones Unidas para precisar que diversidad biológica o biodiversidad es: la variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, incluidos entre otras cosas, los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemas acuáticos y los complejos ecológicos de los que forman parte; comprende la diversidad dentro de cada especie, entre las especies, y de los ecosistemas.

La FAO aporta al documento de estrategia de la Comisión el concepto de biodiversidad en alimentación y agricultura, incluido en el anterior como: el  componente  de  la  biodiversidad  que,  de  una  manera  o  de  otra,  contribuye  a  la  producción  agrícola  y  alimentaria.

Incluye las plantas cultivadas y los animales domesticados en sistemas agrícolas, ganaderos, forestales y  de  acuicultura,  las  especies  forestales  y  acuáticas  obtenidas,  los  parientes  silvestres  de  especies  domesticadas, otras especies silvestres recolectadas para la obtención de alimentos y otros productos.

Y  lo  que  se  conoce  como  “biodiversidad  asociada”,  esto  es,  la  amplia  gama  de  organismos  que  viven en los sistemas de producción alimentarios y agrícolas, y alrededor de ellos, manteniéndolos y contribuyendo a la producción de los mismos. El término agricultura incluye los sistemas de producción agrícolas, ganaderos, forestales, pesqueros y de acuicultura.

Ecosistema

La RAE lo define como: comunidad de los seres vivos cuyos procesos vitales se relacionan entre sí y se desarrollan en función de los factores físicos de un mismo ambiente .

Se entiende un complejo dinámico de comunidades vegetales, animales y de microorganismos y su medio no viviente, que interactúan como una unidad funcional.

Estrategia sobre Biodiversidad de la Unión Europea

La pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas son algunas de las mayores amenazas de la próxima década: reducción de las cosechas, y de la pesca; aumento de inundaciones y de la incidencia de esta y otras catástrofes naturales, perdida de materias primas y fuentes de medicamentos.

La estrategia europea sigue los objetivos marcados por la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los del Acuerdo de París en torno al Cambio Climático.

Entre los objetivos de la Comisión, destacar:

Espacios protegidos

Ampliar las zonas protegidas: la creación de la Red Transeuropea de Espacios Naturales busca el 30% del suelo de Europa y el 30% de los mares de Europa. Incluyendo espacios de alto valor en cuanto a biodiversidad y con mayor riesgo ante el cambio climático. Una protección estricta será aplicable a los bosques primarios y maduros de la UE. Incluyendo turberas, pastizales y manglares, praderas de fanerógamas marinas.

El suelo es un recurso no renovable. Su degradación es causa de importantes cambios económicos y ambientales. La ordenación del territorio, la deforestación, pastoreo excesivo, agricultura insostenible, la construcción y las prácticas de sellado de suelo…

La nueva PAC incluye prácticas sostenibles de gestión del suelo. La rehabilitación de solares contaminados; la recuperación de suelo y su protección, son algunas de las iniciativas a tener en cuenta.La regeneración de suelos es una línea de trabajo fundamental.

El apoyo de la Red Natura 2000 o de estrategias nacionales de protección, serán el marco que fije los objetivos de estos espacios protegidos. Los Estados miembros asumirá los objetivos de la UE dentro de sus regiones biogeográficas, cuencas marinas o recursos locales. Con especial atención a los ecosistemas marinos  y terrestres tropicales y subtropicales en las regiones ultraperiféricas de la UE, que como las Islas Canarias en el caso de España, tienen un gran valor.

Creación de corredores ecológicos que den soporte a una Red Transeuropea de Espacios Naturales

Agricultura

La biodiversidad permite producir alimentos seguros, sostenibles, nutritivos y asequibles. Las personas dedicadas a la agricultura son en muchas comunidades, un pilar social y económico ante la despoblación.

Existen prácticas agrarias que provocan una merma de diversidad y que han de transformar su forma de producir en prácticas sostenibles, mejorando los agrosistemas. La estrategia “De la Granja a la Mesa” y la nueva Política Agraria Común actuarán conjuntamente en este sentido: una producción mas ecológica y un sistema de pago de la PAC basada en los resultados.

Se tiene en cuenta también la seguridad alimentaria y mejora de la renta en el caso de la producción agrícola; prácticas sostenibles (agricultura de precisión, agricultura ecológica, agroecología, agrosilvicultura, pastos permanentes poco intensivos, normas de bienestar de los animales. El 10% de la superficie agraria ha de estar ocupada por elementos paisajísticos de gran diversidad: franjas de protección, setos, árboles no productivos, muros de terraza, estanques…

La agroecología y la agricultura ecológica en particular proporcionan alimentos saludables, aumento de la fertilidad del suelo y promueve y atrae a jóvenes agricultores. El  25%  de  las  tierras  agrícolas  de  la  UE  debe  dedicarse  a  la agricultura ecológica de aquí a 2030. Para la OECDLa creciente demanda de alimentos por la población mundial debe de tener una resupuesta en términos de sostenibilidad, estabilidad y resliencia.

Las aves e insectos de hábitats agrícolas, especialmente polinizadores, son clave en la medición de la salud ambiental de un agrosistema y vitales para la producción y la salud de los alimentos. El 70% de los cultivos de alimentos dependen de la polinización.  Sin embargo están disminuyendo de forma alarmante.

Restaurar en toda Europa los ecosistemas marinos y terrestres degradados, extendiendo la agricultura ecológica, protegiendo  en las tierras dedicadas a agricultura y ganadería aquellos elementos paisajísticos ricos en biodiversidad. Reducir el uso de plaguicidas químicos en un 50% hasta 2030 y otro 50% el uso de plaguicidas más peligrosos antes de final de 2021. Restablecer al menos 25.000 kilómetros de ríos en la UE. Plantar 3 millones de árboles para 2030.

Resiliencia

Dejamos para el final este concepto. Ha pasado de ser conocida como la capacidad de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos, tal y como lo define la RAE, a tratarse de una idea mas amplia.

En el contexto de la Unión Europea, la resiliencia es uno de los elementos clave del plan de recuperación y por tanto del Pacto Verde Europeo.

Un concepto trasladable al mercado único y al futuro de la propia Unión europea. Sobreponerse a la crisis producida por el COVID19, hace de la resiliencia una prioridad europea destacada por el Parlamento Europeo por su: carácter multidimensional de la resiliencia (humano, económico, medioambiental, político, social y en materia de seguridad), convertido en un concepto importante en la política exterior y de seguridad de la Unión, la cooperación al desarrollo y la ayuda humanitaria.