Brexit: el inicio de una ruptura

 

¿Cuando? El 23 de junio de 2016, tras un referéndum en Reino Unido, aprobado por el Parlamento británico el año anterior.

¿Qué? Por primera vez, un Estado miembro de la Unión Europea podría decidir abandonar la Unión. Por primera vez porque antes del Tratado de Lisboa (2007) no se contemplaba esta posibilidad.

¿Cómo? Este Tratado además establece el mecanismo a seguir. A través del Artículo 50. Pero no desarrolla etapas ni aspectos de la negociación. Simplemente indica que el Estado que quiera abandonar la Unión debe solicitarlo al Consejo de la UE a través del Artículo 50.

¿Por qué? El Reino Unido mantiene que la Unión Europea “le cuesta” dinero. Además de no estar de acuerdo con algunas de las políticas de la Unión como inmigración, política exterior, etc…  La complejidad de los motivos, la división de opinión, muy igualada, entre los ciudadanos, pero sobre todo los debates dentro del gobierno han preparado el terreno para una salida compleja y larga.

Reino Unido solicita abandonar la UE

Esto se produjo el 29 de marzo de 2017 y dio lugar a la convocatoria de un Consejo extraordinario en el que participaron 27 Estados miembros. Se empieza a hablar de la Unión de los 27, sin incluir por tanto a Reino Unido.

En este consejo se marcan las “líneas rojas” de la UE: prioridad a los derechos de los ciudadanos, evitar un vacío jurídico a las empresas, establecimiento de un acuerdo ya como país extracomunitario y respetar el acuerdo de Viernes Santo y el proceso de paz con Irlanda del Norte. Además, se fija en este consejo la fecha tope de 29 de marzo de 2019.

A partir de ese momento, la Comisión nombra un negociador, Michel Barnier. Por su parte, Reino Unido también nombra a sus representantes en este proceso, que hoy no son los mismos que en el inicio de las negociaciones.

La ciudadanía también se moviliza a favor (y en contra del Brexit). Los medios de comunicación se hacen eco de cómo los resultados del referéndum no fueron los que muchos esperaban.  O cómo muchos británicos comienzan a preguntarse ¿qué es la UE? ¿qué les aporta y qué les exige? Se producen, además desde el inicio de este proceso, distintas crisis en el propio gobierno de Reino Unido, con Theresa May como primera ministra. Y hablamos de Brexit y de Postbrexit e incluso hay un movimiento a favor de la permanencia denominado Bremain que ha tenido su mayor manifiestación en Londres el pasado 20 de octubre.

Brexit y sus fases de negociación

A día de hoy, se han cumplido dos fases de negociación. La primera, en 2017 ha dado lugar a dos reuniones del Consejo de la UE y a varias directivas y una recomendación de la Comisión.

La segunda fase, comenzó el 29 de junio de 2018 con un nuevo paquete de directivas

Y cinco puntos principales sobre los que basar la negociación:

Fijar un periodo transitorio en las negociaciones de las directivas hasta el 31 de diciembre de 2020.

Durante este periodo, la UE continuará aplicando su acervo o legislación en Reino Unido como en cualquier Estado miembro. Y cualquier cambio que se produzca en estos meses, será también de aplicación.

Reino Unido mantendrá un escrupuloso cumplimiento de sus obligaciones como Estado miembro en función de las obligaciones y acuerdos con la UE, aun cuando no va a participar en ningún organismo establecido por esos acuerdos.

Reino Unido es un tercer país, un país externo a la UE, por lo que no participará en las instituciones ni en la toma de decisiones de la UE.

Todas las estructuras de la UE: presupuestaria, supervisora, judiciaria, instrumentos financieros, etc… serán de aplicación, incluyendo las competencias del Tribunal de Justicia de la UE.

El último consejo de la UE

El pasado 17 de octubre se celebró la última reunión del Consejo sobre el desarrollo del Artículo 50. En él, los representantes de estado y de gobierno de los 27 Estados miembros reafirmaron su confianza en el trabajo de Michel Barnier como negociador e hicieron un repaso del estado de la cuestión. El Consejo ha dejado patente que las negociaciones no están llevando el ritmo de avance esperado.

A partir de ahora, se han de establecer los principios de retirada, teniendo en cuenta que este acuerdo debe incluir aspectos clave para la UE como son: la protección de los derechos de los ciudadanos de la UE que viven en Reino Unido, y viceversa; el acuerdo financiero entre ambas partes y las garantías para impedir una frontera efectiva entre Irlanda y Norte de Irlanda. Este documento de retirada debe de incluir además un periodo de transición que permita a los ciudadanos y a las empresas adaptarse a los cambios consecuentes. El acuerdo de retirada, cuando se firme, deberá representar un importante hito. Deberá ser adoptado por el Consejo y contar con la aprobación del Parlamento Europeo.

Todo ello con una fecha marcada: marzo de 2019.