Unos días atrás abordábamos la Seguridad como una de las competencias digitales claves. Y no es para menos: el primer paso para “sobrevivir” en el entorno digital pasa por proteger nuestros dispositivos para evitar ataques y salvaguardar nuestros datos y privacidad. De forma indirecta, contribuiremos así, además, a mejorar el bienestar social y medioambiental.

Las siguientes competencias necesarias para desenvolverse en el mundo digital se refieren a la información y todo lo relacionado con su búsqueda, clasificación y almacenamiento. Es decir, se trata de adquirir o contar con los conocimientos y habilidades necesarias para encontrar información adecuada a las propias necesidades, almacenarla y organizarla para usarla en beneficio propio, o de una organización.

Los objetivos básicos a cumplir con esta competencia serían:

  • Articular las propias necesidades de información
  • Saber localizar y recuperar datos digitales, información y contenido
  • Juzgar la relevancia de la fuente y su contenido para almacenar, administrar y organizar datos, información y contenido digital

Además del valor que pueda tener en el ámbito profesional, esta es una competencia necesaria en el desempeño personal al utilizar dispositivos conectados a internet y navegar por la Red. Así lo evalúan ya los propios jóvenes, que en estudios recientes con datos obtenidos en distintas universidades españolas, situaron en tercera posición por orden de importancia la capacidad de gestión de la información, o lo que también se conoce como “competencias informacionales”(Cano García, 2016).

De ahí que haya sido reconocida por la Comisión Europea en su Marco Europeo de Competencias Digitales para Ciudadanos (DigComp), y sean objeto de desarrollo en distintas entidades de formación y alfabetización. Así, por ejemplo, en España, organismos como la Red de Bibliotecas Universitarias Españolas (REBIUN)  ya están trabajando en el desarrollo de estas competencias, a través del diseño de  planes de alfabetización.

Competencias digitales de información y alfabetización digital

Desde saber buscar una información, o un documento publicado en la Red, hasta encontrar y recopilar datos sobre una temática o asunto concreto, pasando por saber afiliarse a distintas fuentes o newsletters para recibirla por email; son muchas las fórmulas y metodologías válidas para encontrar y almacenar información, y el conocimiento de las suficientes para desenvolverse con normalidad en esta tarea, conforman parte de las competencias digitales relacionadas con la información y la alfabetización digital.

En ese sentido es clave saber diferenciar entre distintos tipos de contenido, escrito, visual o audiovisual, y conocer las formas de encontrar el contenido de forma diferenciada. Asimismo, es importante diferenciar las búsquedas en motores de búsqueda de las que puedan realizarse en el contenido de una web, o en una red social, por ejemplo.

Por otro lado, almacenar parte de esa información es un grado más de competencia digital, ya que permite mayor profundización y el uso posterior de los datos o el contenido.

Por último, y no menos importante, es fundamental aprender a diferenciar las fuentes fiables de las que no lo son, ya que esto determinará la fiabilidad y veracidad de la información encontrada y su valor para usos posteriores. No todas las fuentes ofrecen las mismas garantías respecto a la veracidad de su contenido, y por lo tanto, no todo el contenido existente en internet tiene el mismo valor. Esto forma parte del concepto de alfabetización digital, que engloba el aprendizaje de las herramientas pero también el discernimiento en su uso.